El carisimo collar que mando a Maria Antonieta a la guillotina

Era un collar de diamantes de 2,800 quilates el que adornaria la caida del Antiguo Regimen. Aunque la majestuosidad del objeto no estaba destinado para adornar el cuello de Maria Antonieta, si sirvio como excusa para enviarla a la guillotina el 16 de octubre de 1793.

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Alrededor de la compra de esta joya se entretejieron muchas teorias de conspiracion que al final terminaron por convertirse en el escandalo que hizo que el pueblo derramase toda la rabia contenido contra sus soberanos. Y aunque Maria Antonieta desconocia por completo que habian tomado su nombre por la adquisicion de este collar, no se le permitio defenderse con justicia de las viles acusaciones; muy a diferencia de los verdaderos culpables que saldrian mas o menos airosos, o por lo menos con la cabeza pegada al cuerpo.

La crisis economica y social que estaba ahorcando al regimen por el innecesario excesivo gasto de Maria Antonieta, y mas el costoso apoyo militar en las Trece Colonias para lograr su emancipacion de las garras de Jorge III del Imperio britanico azotaba principalmente al pueblo; quienes no lograban salir a flote del hambre y la miseria.

Por esta razon, los jacobinos estaban mirando a los reyes con lupa; pues buscaban el fosforo con el cual iniciar la revolucion francesa. Es de esta manera que el escandalo del collar se convertiria en la excusa mas brillante con que ese podria iniciar la violenta desarticulacion del viejo sistema feudal.

Toda Francia estaba convencida de que la reina habia comprado la joya mas cara de toda Europa, un collar que de 647 diamantes. Tambien creian en su mayoria que ella habia dicho que si el pueblo no tenia pan, bien podia comer pasteeles cosa que fue totalmente desmentida años despues.

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Existe una razon de por que el collar que nunca adorno el escote de Maria Antonieta despertara la colera de la multitud, incluso de la nobleza, se debe al desembolso desorbitado precio de casi 2 millones de libras.

¿Como podria la reina pagar aquella suma de dinero, solo por un capricho que bien habia podido haber rescatado a Francia?

Jeanne Valois de la Motta

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Pero la justicia señalo a la persona equivocada; ya que los verdaderos autores de la despifarrada serian dos personas ajenas a ella: Jeanne Valois De la Motta ( una estafadora) y el obispo de Estrasburgo, el cardenal Rohan (el clero mas ingenuo de toda la historia) lo mas interesante del asunto es que tanto la ladrona como el idiota (ingenuo) unicamente buscaban la bienaventuranza y el reconocimiento de la soberana.

La maldicion de este collar data del reinado de Luis XV, el suegro de Maria Antonieta, quien queria agasajar a su amante Madame du Barry. Para ello, encargaria a los mejores artesanos de la epoca, Marc Bassenge y Charles Boehmer, la pieza mas sensacional del mundo 2800 quilates repartidos en 647 diamantes y consecuentemente la mas cara un millon seiscientas libras. No obstante, la muerte sorprenderia al soberano y su querida nunca veria tal muestra de amor.

La discrecion de los joyeros les hizo guardar silencio sobre el verdadero cuello al que iba destinado la sublime gargantilla. De esta manera, acudirian a la corte española a tentar a Carlos III con los diamamntes caprichosamente engarzados. El rey que habia hecho meticulosamente los calculos, considero inoportuno adquirir el collar. Despues de la desilucion de Bassenge y Boehmer, se les ocurriria acudir con la soberana mas caprichosa del momento, Maria Antonieta.

Carlos III

Un 9 de agosto de 1785, Charles Auguste Bohmer, uno de los mas celebres joyeros parisienses, acudio a Versalles a ver a Maria Antonieta para solicitarle que pagase el collar que la reina habia comprado por mediacion del cardenal Rohan.

Se trataba de una joya unica en el mundo, compuesta por 647 diamantes escogidos entre los mas grandes, mas bellos y mas puros nunca vistos, y en cuya adquisicion el joyero habia invertido todo su capital.

Charles Auguste Bohmer

Este collar habia sigo entregado seis meses antes al cardenal, que tenia que pagarlo en dos plazos, pero hasta el momento no habia hecho honor a sus compromisos, exponiendo al joyero al peligro de una bancarrota. El collar costaba, en efecto, la cifra elevada de un millon seiscientas mil libras.

Maria Antonieta a diferencia de su madre Maria Teresa I de Austria, que se preocupo por ilustrarse como tambien a cada esquina de su vasto imperio caia en tentaciones banales, despilfarrando fortunas en vestuario y complementos; y por esta razon la visitarian con la esperanza de que se encrapichara con la pieza.

Cardenal Rohan

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Sin embargo, no tendrian suerte. Maria Antonieta atravesaba un trance de lucidez; en el que a pesar de quedar fascinada, se vio en el deber de rechazar el collar.

Con la amenaza de una bancarrota los artesanos, decidirian desmontarlo y vender cada uno de los diamantes por separado. No obstante esta tarea no se llevaria a cabo o al menos por sus creadores porque los rumores de un majestuoso collar que no se habia vendido llegaria a los oidos de Jeanne Valois de la Motta.

Collar de Perlas

Esta dama de una moral torcida la cual manifestaba ser intima amiga de la reina y buscaba desesperadamente la solvencia economica para su falso pero lujoso estatus social. Y como en estas historias nunca falta el ingenuo que se tire por la borda, empezaria a crearse una red de mentiras que salpicarian a la monarca.

Como el cardenal Rohan, era un novato pero viejo que ansiaba con locura el reconocimiento de Maria Antonieta porque aunque era la maxima autoridad eclesiastica de Versalles, deseaba ser nombrado Ministro por ella, se dejaria embaucar por Jeanne Valois De la Motta creyendo cada una de sus excentricas condiciones todo con el fin de ser bienvenido entre las amistades privilegiadas de la reina.

El cura que tenia mucho capital efectuo el pago de la joya a Bassenge y Bohmer. Una vez que el cardenal tenia en sus manos la codiciada joya, se la entregaria a De la Motte delante de un falso lacayo de la reina, llamado Marc Retaux de Villete proxeneta y amante de la mas embustera de su tiempo, para que hiciera el servicio de entrega a Maria Antonieta.

Los 647 diamantes fueron a otro lugar menos a las posesiones de la soberana. Sin embargo, De la Motte no sufria ni espasmos ni angustias sobre la posibilidad de que el cardenal la descubriera; es mas, confiaba demasiado en Rohan.

Retaux de Villete comienza a desengarzar los diamanetes de la monumental joya, para empezar a venderlos en Paris. Sin embargo, esto levantaria las sospechas de los artesanos a causa del bajo precio de venta. Ante la denuncia, las autoridades lo retienen por ser sospechoso de robo. El astuto proxeneta responde que las piedras pertenecen a Valois De la Motte que aunque era desconocida por la reina, se habia convertido en la condesa mas popular de toda Versalles al murmurar las gentes que era intima amiga de Maria Antonieta, solo por la pomposidad de su vida y su continua presencia en la corte, para que lo dejaran libre.

Nadie se atrevio a poner en duda la honorabilidad de la estafadora, pero con el riesgo pisandole los talones, decide sustituir a su amante por su marido, Antoine Nicolas de la Motta en la meticulosa venta.

Este complice se deshizo de casi todas las piedras entre los joyeros de Londres, cuyo origen nunca se cuestiono.

Sin el collar y sin dinero, la condesa de Valois entra en panico, y envia una carta a Boehmer confesando que la carta de garantia de la reina falsa, pero que el cardenal Rohan pagaria igualmente la suma. Sin embargo, la reputacion de este clerigo estaba entredicha, por lo que este joyero acude directamente con la soberana.

Al final la reina se dio cuenta que usaron su nombre para hacer una estafa. Cuando Bohmer le da los detalles, la aversion contra Rohan motivada por un desaire que le habia hecho a su madre Maria Teresa I de Austria va en crescendo, hasta el punto de explotar y recurrir a la detencion del cardenal.

Pero Maria Antonieta no tenia nada a su favor. Puesto que la iglesia no permitiria que mancharan el buen nombre de uno de sus siervos mas importantes, ni tampoco la nobleza el obispo de Estrasburgo ya que venia de una poderosa famlia que monto en colera cuando Luis XVI por orden de su esposa lo manda arrestar publicamente para recluirlo en la Bastilla.

Reestablecido a sus antiguas funciones tras la muerte de Luis XV, no dejo escapar una esplendida ocasion de humillar a la autoridad real; el poderoso clan de los Rohan defendio con uñas y dientes al cardenal, pintandolo como una victima de Maria Antonieta; la iglesia se mostro indignada por el publico ultraje inferido por el rey a uno de sus principes, y el proceso se cerro con la plena absolucion del prelado y con la condena solo de Madame de La Motte.

Nadie dudo que la verdadera culpable era la reina y su pasion, desenfrenada por el lujo, los vestidos y las joyas era bien conocida, como tambien lo era la desenvoltura con que se servia del dinero publico. El cardenal Rohan fue puesto en libertad por el Parlamento, y al final fuese verdadero o falso Francia necesitaba un motivo para derrocar a la Austriaca y esa era la unica manera de cerrar el capitulo del feudalismo y la pronunciada desigualdad social; que la revolucion prometia erradicar.

El final de la Motte se produjo en 1791 arrojandose por la ventana en un ataque de mania persecutoria impido que esta magnifica embaucadora fuera llevada en triunfo por Paris.

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