El doloroso dia del trabajador
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"Pues hoy en el momento en que escribo estas lÃneas, el proletariado de Europa y América pasa revista a sus fuerzas, movilizadas por vez primera en un solo ejército, bajo una sola bandera y para un solo objetivo inmediato: la fijación legal de la jornada normal de ocho horas, proclamada ya en 1866 por el Congreso de la Internacional celebrado en Ginebra y de nuevo en 1889 por el Congreso obrero de ParÃs.
El espectáculo de hoy demostrará a los capitalistas y a los terratenientes de todos los paÃses que, en efecto, los proletarios de todos los paÃses están unidos. ¡Oh, si Marx estuviese a mi lado para verlo con sus propios ojos!"-Friedrich Engels
El espectáculo de hoy demostrará a los capitalistas y a los terratenientes de todos los paÃses que, en efecto, los proletarios de todos los paÃses están unidos. ¡Oh, si Marx estuviese a mi lado para verlo con sus propios ojos!"-Friedrich Engels
Pero ¿De que habla Engels? habla sobre los acontecimientos de lo trabajadores en el mundo y hoy, hablaremos de uno en concreto que sucedió en el año de 1886 porque repercutió en los demás paÃses que fue la revuela de Haymarket que en realidad empezó como una protesta pacifica de 200,000 personas, el 1 de mayo en Chicago, Estado Unidos.
Allà la huelga se extendió durante dos dÃas más, la tensión crecÃa por momentos y la PolicÃa actuó en una manifestación con más de 50.000 personas.
Era la segunda jornada de paros y los trabajadores tomaron represalias al tercer dÃa, acudiendo a la única fábrica que se mantenÃa abierta y enfrentándose a los esquiroles en una pelea campal. Sin previo aviso, la PolicÃa procedió a disparar, dejando seis vÃctimas y decenas de heridos.
Consciente del caos que reinaba en la ciudad, el alcalde permitió la concentración que se habÃa programado para el 4 de mayo en Haymarket Square. No sólo la permitió, sino que acudió a ella para garantizar la seguridad de los trabajadores, aunque no sirvió de demasiado. Una vez terminada la reunión, a la que acudieron cerca de 20.000 personas, el inspector de PolicÃa John Bonfield consideró que no debÃa haber nadie en la plaza y dio orden a 180 agentes de intervenir. De repente, estalló una bomba y mató a un policÃa, lo que provocó que sus compañeros abrieran fuego contra la multitud. Se desconoce el número de vÃctimas.
Entonces se declaro un estado de sitio, y toque de queda en Chicago el cual hubieron varias detenciones, de los cuales 31 fueron llevadas a juicios y de los cuales 5 ejecutados a pena de muerte.
En la actualidad se considera que su juicio estuvo motivado por razones polÃticas y no por razones jurÃdicas, es decir, se juzgó su orientación polÃtica libertaria y su condición de obreros rebeldes, mas no el incidente en sà mismo.
En la actualidad se considera que su juicio estuvo motivado por razones polÃticas y no por razones jurÃdicas, es decir, se juzgó su orientación polÃtica libertaria y su condición de obreros rebeldes, mas no el incidente en sà mismo.
A finales de mayo de 1886 varios sectores patronales accedieron a otorgar la jornada de ocho horas a varios centenares de miles de obreros.
El éxito fue tal, que la Federación de Gremios y Uniones Organizadas expresó su júbilo con estas palabras: «Jamás en la historia de este paÃs ha habido un levantamiento tan general entre las masas industriales. El deseo de una disminución de la jornada de trabajo ha impulsado a millones de trabajadores a afiliarse a las organizaciones existentes, cuando hasta ahora habÃan permanecido indiferentes a la agitación sindical».
El éxito fue tal, que la Federación de Gremios y Uniones Organizadas expresó su júbilo con estas palabras: «Jamás en la historia de este paÃs ha habido un levantamiento tan general entre las masas industriales. El deseo de una disminución de la jornada de trabajo ha impulsado a millones de trabajadores a afiliarse a las organizaciones existentes, cuando hasta ahora habÃan permanecido indiferentes a la agitación sindical».
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